Semana en el Oratorio

Desprecio de los bienes mundanos

23.5.17

Donde la ciencia no llega


Siempre me ha llamado la atención la fe ciega que en la ciencia tienen los ateos, como si ese fuera su dogma -que lo es- y su único apoyo. Y me llama la atención porque la ciencia humana es tan limitada que en muchísimas ocasiones no puede hacer más que cruzarse de brazos. A la incapacidad absoluta, por lo tanto, algunos lo llaman ciencia y se fían de ella, ¡y nos acusan a los cristianos de creer en fantasías!

Podría contar muchos casos para poner ejemplos de ésto, pero contaré el mío propio que conozco de primera mano y así puedo dar fe de ello. Cuando enfermó un familiar muy cercano a mí de un edema pulmonar, les inquirí a los médicos del hospital (un hospital universitario con "sesudos doctores" mundialmente reconocido) que hicieran algo, lo que fuera, para ayudarle a respirar, porque solamente podían hacer por esa persona dejarla sentada en la cama.

22.5.17

Dueña de tiempos


Letanías de nuestra señora la Virgen del Monte Carmelo:
Dueña de tiempos.


Que la virgen Carmelitana ofrezca la posibilidad de liberar al ánima de las penas del purgatorio en el primer sábado tras el fallecimiento (lo que se ha dado en llamar "el privilegio sabatino") es una buena muestra de la particularidad de su intermediación como "dueña del tiempo", o para ser más exactos, "Dueña de Tiempos", que es uno de los títulos que se le adjudican en sus letanías.

Dueña de tiempos también implica su atenta y estimabilísima colaboración en nuestra hora final, nuestra muerte en donde todas las fuerzas del mal confluyen para retarnos, debilitarnos y hacernos perder el paraíso, pues bien sabe nuestro Enemigo que, aunque nuestra vida hubiera sido un camino de virtudes, podemos perderlo todo si caemos en el momento final.

"El manuscrito del Purgatorio", en formato Excel y para descargar


A estas alturas creo que todos sabéis ya que el "Manuscrito del Purgatorio" es un libro de enorme valor espiritual. Lo bueno que tiene en su formato de frases cortas es que, además de como un libro convencional, puede ser muy útil como lectura de diario, obteniendo de él una frase que en determinados momentos nos sirva de inspiración y de ayuda moral. Por eso, en el Oratorio Carmelitano nos hemos esforzado en que pueda ser de utilidad en este sentido para todos los que usáis ordenador, tablet o smartphone. El problema al que nos enfrentábamos es qué aplicación utilizar, para hacer que nos ofreciera una frase al azar sacada del libro y, a la vez, que pudiera ser de fácil instalación para todos.

Para solucionarlo hemos recurrido a una hoja de cálculo en Excel, un programa (o su visualizador compatible) que está disponible en la mayoría de ordenadores y smartphones, de esta forma podemos llevar todo el contenido del "Manuscrito del Purgatorio" cómodamente con nosotros.

19.5.17

Santo Rosario en latín (con letanías)


Cada vez somos más personas las que rezamos el rosario en latín. Si tú también eres de ese tipo o, simplemente, quieres tener el rosario en latín, a continuación te lo ofrecemos íntegramente.

A diferencia de otros sitios, este rosario en latín que en el Oratorio Carmelitano te ofrecemos es uno de los más completos porque hemos intercalado la traducción en español en determinadas partes que hemos creído necesaria, para su mejor interpretación y para entender mejor el significado de la oración. Esas partes aparecerán en cursiva en el texto.

18.5.17

El "rosario ermitaño" en detalle


El "rosario ermitaño", "rosario del eremita" o "rosario de los ermitaños" es uno de los rosarios más sencillos y fáciles de transportar. Consiste en una cuerda en donde se encuentran diez nudos, cada uno de los mismos corresponden a diez Avemarías (aunque también puede poseer cuentas hechas con perlas u otros materiales en lugar de nudos). Es, por lo tanto, un rosario decenario, que nos sirve para llevar la cuenta decena por decena.

Antes de los diez nudos o cuentas, existen otras cinco cuentas o cinco nudos, que corresponden a cinco misterios. Su función es la de llevar la cuenta de cada Misterio que estemos rezando, de manera que no perdamos la cuenta de ninguno de ellos.