Semana en el Oratorio

Desprecio de los bienes mundanos

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20.9.17

El camino de la cruz es el camino al Cielo


Dice San Agustín que la felicidad de la Vida Eterna es aquella que por un solo día en ella, aunque se pasen innumerables penas, se compraría barata. San Juan Crisóstomo añade lo que parece aún más encarecimiento, pero no lo es: conviene saber, que es de tan excepcional valor aquella felicidad y tan inmensa, que si fuera necesario padecer todos los días gravísimos tormentos, y los del mismísimo infierno, por algún tiempo, los deberíamos de sufrir por ver y gozar a Dios en compañía de sus ángeles en el Cielo.

¡Oh, gente desterrada de la Patria Celestial! Disponéos a mudar de patria, labrándoos para aquel edificio celestial, pues el padecer sobre este mundo terrenal ha de acabarse, y la gloria será eterna, siendo esta la puerta del Cielo, y esta vida no es de descanso, sino de cruz, pues como clama Santa Teresa, "padecer quiero, Señor, porque vos padecísteis".

2.5.17

El purgatorio aquí en la tierra


En una entrevista con María Simma, la vidente que durante la mayor parte de su vida decía que veía ánimas del purgatorio, que iban a ella a pedirle ayuda y oraciones, respondía a una pregunta que le hacían respecto a que si podía haber personas que vivieran ya, en esta tierra, el purgatorio, afirmando categóricamente que sí. Y explicaba esta señora que hubo casos en los cuales algunas personas le pedían a Dios nuestro Señor que les enviaran los castigos en esta vida, y así poder ir directamente -o lo más directamente posible- al cielo en la otra.

Otras personas no piden eso: simplemente, lo tienen. Este es el caso del niño Amara Stover, cuyas imágenes de los tumores que le salen y le deforman dieron la vuelta al mundo hace algunos días. Ante el dolor y, en este caso, el dolor que no parece tener sentido alguno (como es el caso de un niño, ¿qué pecados puede tener un niño?), siempre nos sentimos un poco sobrepasados. Es ese tipo de dolor que muchos ateos utilizan como razonamiento para decir aquello de: "¿ves cómo no existe Dios? Porque si existiera, no permitiría esas cosas".