La Debilidad desciende en gran parte de la Sensualidad. El hombre es débil porque lleva en su seno el germen del pecado; pero la Molicie, la Delicadeza y la Comodidad lo debilitan más, llegando el alma débil a caídas tan grandes que sólo Yo conozco muchas veces su extensión.
En la vida del espíritu la Inercia hace crecer en el alma la Debilidad en todas sus acepciones, mas la Cruz fortalece y vigoriza al alma, y con esto echa abajo a tan funesto vicio.