Uno de los efectos de la Extremaunción es dar fuerza para la última pelea, y confortar mucho la esperanza y confianza con que se ha de salir de esta vida. Por esto se da en forma de unción, porque los luchadores antiguamente se solían ungir con óleo para tener más dispuestos los miembros para la lucha. Con la imagen de Cristo crucificado en las manos, dígale: "Señor, os suplico con toda humildad, que en este camino tan peligroso y trabajoso que ahora empiezo a andar, queráis no dejarme, sino ir conmigo, asistirme y gobernarme; que acabéis de quitar todo lo que en mí ha quedado de pecado y de culpa, y las malas inclinaciones que me han poseído, y que me queráis acoger y tener para siempre por esclavo vuestro".
Dando gracias a Dios después de haber recibido este Sacramento, vistiéndose de la virtud de su sangre, entre el moribundo confiadamente en la pelea con el espíritu tentador.
| Preparación: OratorioCarmelitano.com / OratorioCarmelitano.blogspot.com
Excelente explicación sobre este tema!
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