Oración indulgenciada:
¡Oh, amabilísimo y lleno de caridad, San Francisco Javier! Junto con vos adoro con la mayor reverencia a la Divina Majestad; y complaciéndome sumamente en los especialísimos dones que os comunicó, de gracia en tiempo de vuestra vida, y de gloria después de vuestra muerte, le rindo las más afectuosas gracias; y os suplico con todo mi corazón, que me alcancéis por vuestra poderosísima intercesión la gracia importantísima de vivir y morir santamente; os suplico, además, que me impetréis... (aquí se pide las gracias espirituales y temporales que se desean). Y si esto que pido no es para mayor gloria de Dios y mayor bien de mi alma, alcanzarme vos lo que sea más conforme a lo uno y a lo otro. Así sea.
Padrenuestro, Avemaría y Gloria.
(Oración compuesta por el reverendo Mastrilli e indulgenciada para la Novena de la Gracia de San Francisco Javier).