Concédenos Padre y Señor misericordioso, tu auxilio en nuestra fragilidad, para que los que invocamos la memoria de nuestra Señora del Carmelo, por el auxilio de su intercesión nos levantemos y dejemos atrás nuestras iniquidades.
Por Jesucristo nuestro Señor, que contigo y el Espíritu Santo vive y reina por los siglos de los siglos. Amén.
| Preparación: OratorioCarmelitano.com / OratorioCarmelitano.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario