Semana en el Oratorio

Desprecio de los bienes mundanos

25.3.20

Envía a tu ángel a escuchar la Santa Misa por ti


Oración para enviar a tu ángel de la guarda cuando no puedas ir a la Santa Misa:



Oh Santo ángel que estás a mi lado, acude a la Santa Misa por mí.

Arrodíllate en mi lugar, que tu presencia ocupe el sitio que yo quisiera ocupar frente al sagrario.

En el ofertorio, toma todo lo que soy y tengo y colócalo como un sacrificio sobre el trono del altar.

En la sagrada consagración, adora con amor seráfico al Señor escondido bajo las especies del vino y del pan, bajado desde el cielo por nuestro amor.

Ora por aquellos que me aman entrañablemente, y por los que me causan dolor, que la sangre de Jesús pueda limpiar todos los corazones que sufren, dé alivio a las almas, y consuelo a las ánimas del Purgatorio.

Cuando el sacerdote tome la Comunión tráeme a mi Señor, para que su dulce corazón pueda estar en el mío y yo ser su templo.

Ora para que el divino sacrificio borre todos mis pecados, me una cada día más a Dios, y cumpla siempre y en todo su Santa Voluntad.

Luego tráeme a casa la bendición de Jesús y su paz, y suplícale sepa yo aprovechar todas sus gracias.

Te agradezco, finalmente, el servicio prestado, así como tu compañía durante todos los días de mi vida, hasta hoy y desde hoy. Ayúdame a ser dócil, paciente y humilde, para que no te desagrade nunca y pueda así adorar y alabar a la Santísima Trinidad en tu compañía por toda la eternidad.

Santo ángel de mi guarda, vigila mis pasos y guárdame bajo el abrigo de tus alas.

Amén