Semana en el Oratorio

Desprecio de los bienes mundanos

28.9.23

Acto de súplica matutino



Yo os suplico, ¡oh Padre Omnipotente!, por vuestra infinita misericordia, los méritos de mi Redentor Jesucristo, y la intercesión de su Santa Madre la Virgen del Monte Carmelo, y la de todos mis celestes protectores, os dignéis mirar con paternal amor esta mi casa y a mi familia, preservándonos de toda desgracia, y especialmente de la mayor de ellas, que es ofenderos.

Os ruego asimismo, ¡oh mi Dios!, por la exaltación y santificación de vuestra Iglesia, por la paz y la concordia entre los pueblos y entre los reinos cristianos, la desaparición de las herejías, la conversión de los no creyentes e infieles, la llegada de tu Evangelio a quienes no les han predicado.

También os suplico concedáis la entrada en vuestro reino a las almas de los fieles difuntos que están en el Purgatorio, a quienes aplico todas las indulgencias que haya ganado o ganaré en este día, comenzando por las almas que sean de mayor agrado vuestro y obligación mía, y rogándoos humildemente que hagáis extensiva a ellas la divina bendición que os pido. Que así sea, Señor.

(Presignarse diciendo: En el nombre del Padre, del Hijo, y del Espíritu Santo. Amén).



27.9.23

Oración matutina al ángel custodio



Celeste espíritu, que la misión de custodiarme tienes de Dios, a la luz plácida del nuevo Sol te hago ofrenda de tierno amor.

Dáme solícito tu inspiración, de todo riesgo líbrame hoy, y danos la bendición del Altísimo, que alcance a todos los que yo amo.

Amén

26.9.23

Copla al ángel o al santo de tu nombre



Dígase según proceda, bien:

Arcángel santo / Glorioso santo / Gloriosa santa...

...cuyo nombre llevo, mi alma os saluda y felicita ufana,
y al implorar a Dios cada mañana
vuestro socorro a demandar me atrevo,
para que siendo aceptada mi oración
alcance a veros en la eterna región.

Amén.

25.9.23

Saludo a San José



Saludo humilde os rindo, patriarca San José, vuestra memoria quiero honrar con gozo y sencillez.

Pues tantas preeminencias lográsteis poseer, siendo custodio del Niño que es Rey de cielo y tierra.

Hoy que en su eterna gloria le veis brillar como Dios, rogadle por los tristes que están a vuestros pies.

¡Oh esposo de María!, sus hijos son también los que en la tierra gimen pidiéndo vuestra merced.

Que todos los fieles tengan en Vos, un grande y fiel abogado, que su defensa abrace, junto al Supremo Juez.

Y así, todos en la excelsa y feliz Jerusalen, puedan ver la gloria del que abrigó al Niño de Belén.

Amén.


24.9.23

Canto a la Santísima Virgen María



Honor os rindo y gratitud ferviente,
oh Estrella Matinal, Mística Rosa,
del Autor de la luz Madre potente
y del triste mortal Reina piadosa.

No desprecies por pobres mis loores
ni me neguéis jamás vuestra asistencia,
y ve mirando con igual clemencia
a mis deudos, amigos, bienhechores.

También recuerda los dolores
de los que en la noche de la tumba fría
la lumbre aguardan del eterno día.