Sí, amigo, examina tu muerte. No cómo has muerto, sino cómo vas a morir y cómo estás muriendo. Muchas cosas no están en tu mano: déjalas a la providencia de tu Padre Dios. Muchas están en tu mano: arréglalas ahora, con tiempo y pronto.
1- Preparación remota.
Tienes obligación de estar preparado para morir. ¿Lo estás? ¿O todo lo dejas para "más tarde"?
¿Tienes hecho el testamento? ¿Y tienes arregladas todas tus cosas terrenas, de modo que tu familia quede sin enredos, y la justicia y la caridad satisfechas? Ten hecho el testamento "pronto", y ten arreglada tu conciencia y tu casa "siempre".
¿Vives en gracia para morir en gracia? Porque tienes grandísima obligación de morir en gracia; si no, no te salvas; así que vive siempre sin pecado. Esta es la mejor señal de predestinación. También son señales de predestinación y muerte en gracia la oración frecuente, la comunión frecuente, la devoción al Sacratísimo Corazón de Jesús, la comunión en los nueve primeros viernes de mes, la devoción a la Virgen María, y la caridad con el prójimo por Dios.
2- Preparación próxima.
¿Quieres recibir a tiempo los Sacramentos? ¿Los pedirás tú mismo a tiempo, sin aguardar a estar "muy grave"? Los parientes no te avisarán sino cuando estés muy grave, los médicos, cuando piensen que no tienes otro remedio. Basta estar "sencillamente grave" para recibir el viático. Dí que tú lo quieres así.
Cuando menos, confiesa a tiempo, ten valor y no tengas miedo; confía en Jesucristo y en la Virgen, nuestra Señora del Carmelo; sufre las penas y dolores con resignación; lee, si puedes, la Pasión; di jaculatorias, sobre todo el nombre de Jesús y los de José y María; ten encendida la candela, símbolo de la fe y de la gracia; ten a tu alcance un crucifijo, siempre a mano, y procura que te visite a menudo un sacerdote.
¡Dios te dé buena muerte! Es la mejor de las luces vespertinas, que enlaza con el día eterno.
| Preparación: OratorioCarmelitano.com / OratorioCarmelitano.blogspot.com
No hay comentarios:
Publicar un comentario