A los Ejercicios Espirituales, el hombre humilde viene a aprender.
Si no tiene Fe, busca el camino de Dios a través de la belleza de la Verdad impresa en el alma de cada uno.
Si tiene Fe, busca cómo practicarla, porque la Fe comporta una exigencia moral.
"Es necesario el heroísmo del martirio para vivir cada día el cristianismo. Porque los consejos evangélicos son para todos. Por esto, quien escoge el dinero, apostata de Cristo. La gran tentación de hoy para el cristiano es instalarse y transaccionar con el Mundo", ha dicho recientemente en una conferencia uno de los mejores teólogos españoles, el Profesor Antonio Ma. Oriol.
Nos aposentamos. En la medida que no nos perjudica... somos cristianos. "No hay para tanto...Tenemos que vivir"... Expresiones que tienen un trasfondo de cesión o rendición a las exigencias del mundo.
En los Ejercicios Espirituales, el hombre humilde comprende que los cristianos somos discípulos de un Hombre al que el mundo (ese mundo que muchos tanto aman) crucificó; seguidores somos de un Cristo doliente pero, al fin, resucitado.
| Preparación: OratorioCarmelitano.com / OratorioCarmelitano.blogspot.com
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