Oración inicial:
Señor Dios mío, dignaos permitirme -a pesar de mi indignidad- que en este señalado día en que la Iglesia militante os rinde acciones de gracias por la felicidad de la Iglesia triunfante, se asocie mi humilde voz a todas las que os glorifican y bendicen, honrando la memoria de vuestros santos.
Ellos, Señor, son los dignos modelos que, como imágenes suyas, nos dejó en la tierra vuestro divino Hijo.
Ellos contemplan, dichosos para siempre, la gloria de aquel Glorioso Maestro, cuyas lecciones practicaron, cuyas huellas siguieron, cuya gracia patentizaron a vista del mundo con la santidad de su vida, y hoy reinan con Él en vuestra mansión dichosa, intercediendo por los hermanos que aún combatimos y sufrimos en este valle de lágrimas.
Reciba, pues, vuestra misericordia, con esos ruegos que os dirige su depurada caridad, los que osamos pronunciar bajo su amparo, nosotros pobres pecadores, que al hacer memoria de los triunfos que concedísteis a tantos campeones de Jesucristo, os pedimos rendidamente que, en virtud de los méritos del mismo Redentor nuestro, nos dispenséis la gracia de que acertemos a honrar a sus bienaventurados servidores con la imitación constante de sus virtudes.
Amén.
Letanías de los santos:
Señor, ten piedad de nosotros.
R.: Señor, ten piedad de nosotros.
Señor, Ten piedad de nosotros.
R.: Señor, ten piedad de nosotros.
Jesucristo, escúchanos.
R.: Jesucristo, escúchanos.
Padre celestial, que sois Dios,
R.: ten piedad de nosotros.
Hijo Redentor del mundo, que sois Dios,
R.: ten piedad de nosotros.
Espíritu Santo, que sois Dios,
R.: ten piedad de nosotros.
Trinidad Santa, que sois un solo Dios,
R.: ten piedad de nosotros.
Santa Virgen María,
R.: ruega por nosotros.
Santa Madre de Jesucristo,
R.: ruega por nosotros.
Santa Reina de todos los Santos,
R.: ruega por nosotros.
San Miguel,
R.: ruega por nosotros.
San Gabriel,
R.: ruega por nosotros.
San Rafael,
R.: ruega por nosotros.
Santos Ángeles y Arcángeles,
R.: rogad por nosotros.
Santas Potestades y Dominaciones,
R.: rogad por nosotros.
Santas órdenes todas de espíritus bienaventurados,
R.: rogad por nosotros.
San Juan Bautista,
R.: ruega por nosotros.
San José Patriarca,
R.: ruega por nosotros.
San Joaquín,
R.: ruega por nosotros.
Santos patriarcas y profetas,
R.: rogad por nosotros.
San Pedro,
R.: ruega por nosotros.
San Pablo,
R.: ruega por nosotros.
San Juan,
R.: ruega por nosotros.
San Andrés,
R.: ruega por nosotros.
San Santiago,
R.: ruega por nosotros.
Santo Tomás,
R.: ruega por nosotros.
San Felipe,
R.: ruega por nosotros.
San Bartolomé,
R.: ruega por nosotros.
San Mateo,
R.: ruega por nosotros.
San Simón,
R.: ruega por nosotros.
San Tadeo,
R.: ruega por nosotros.
San Matías,
R.: ruega por nosotros.
San Marcos,
R.: ruega por nosotros.
San Lucas,
R.: ruega por nosotros.
San Bernabé,
R.: ruega por nosotros.
Santos Apóstoles y Evangelistas,
R.: rogad por nosotros.
Santos discípulos del Señor,
R.: rogad por nosotros.
Santos inocentes,
R.: rogad por nosotros.
San Esteban,
R.: ruega por nosotros.
San Lorenzo,
R.: ruega por nosotros.
San Vicente,
R.: ruega por nosotros.
San Fabián y San Sebastián,
R.: rogad por nosotros.
San Cosme y San Damián,
R.: rogad por nosotros.
San Gervasio y San Protasio,
R.: rogad por nosotros.
Todos los Santos Mártires,
R.: rogad por nosotros.
San Silvestre,
R.: ruega por nosotros.
San Gregorio,
R.: ruega por nosotros.
San Ambrosio,
R.: ruega por nosotros.
San Agustín,
R.: ruega por nosotros.
San Gerónimo,
R.: ruega por nosotros.
San Martín,
R.: ruega por nosotros.
San Nicolás,
R.: ruega por nosotros.
Todos los Santos Pontífices y Confesores,
R.: rogad por nosotros.
Todos los Santos Doctores,
R.: rogad por nosotros.
San Antonio,
R.: ruega por nosotros.
San Benito,
R.: ruega por nosotros.
San Bernardo,
R.: ruega por nosotros.
Santo Domingo,
R.: ruega por nosotros.
San Francisco,
R.: ruega por nosotros.
Todos los Santos Sacerdotes y levitas,
R.: rogad por nosotros.
Todos los Santos Monjes y ermitaños,
R.: rogad por nosotros.
Santa Ana,
R.: ruega por nosotros.
Santa María Magdalena,
R.: ruega por nosotros.
Santa Agata,
R.: ruega por nosotros.
Santa Lucía,
R.: ruega por nosotros.
Santa Inés,
R.: ruega por nosotros.
Santa Gertrudis,
R.: ruega por nosotros.
Santa Cecilia,
R.: ruega por nosotros.
Santa Catalina,
R.: ruega por nosotros.
Santa Anastasia,
R.: ruega por nosotros.
Santa Teresa,
R.: ruega por nosotros.
Todas las Santas Vírgenes y viudas,
R.: rogad por nosotros.
Todas las Santas penitentes,
R.: rogad por nosotros.
Todos los Santos y Santas del Señor,
R.: rogad por nosotros.
Sednos propicio,
R.: Perdónanos, Señor.
Sednos propicio,
R.: Escúchanos, Señor.
De todo pecado,
R.: Líbranos, Señor.
De vuestra Santa indignación,
R.: Líbranos, Señor.
De muerte desastrosa o repentina,
R.: Líbranos, Señor.
De las asechanzas del enemigo,
R.: Líbranos, Señor.
Del rayo y la tempestad,
R.: Líbranos, Señor.
De la impenitencia final,
R.: Líbranos, Señor.
De la muerte eterna,
R.: Líbranos, Señor.
De todo mal,
R.: Líbranos, Señor.
Por el misterio de vuestra Santa Encarnación,
R.: Líbranos, Señor.
Por vuestra feliz Natividad,
R.: Líbranos, Señor.
Por vuestro bautismo y ayunos,
R.: Líbranos, Señor.
Por vuestra cruz y pasión,
R.: Líbranos, Señor.
Por vuestra muerte y vuestra sepultura,
R.: Líbranos, Señor.
Por vuestra Resurrección triunfante,
R.: Líbranos, Señor.
Por vuestra Ascensión gloriosa,
R.: Líbranos, Señor.
Por el advenimiento del Espíritu Santo,
R.: Líbranos, Señor.
Por la intercesión de todos vuestros Santos,
R.: Líbranos, Señor.
En el día del Juicio,
R.: Líbranos, Señor.
Nosotros, pobres pecadores, os rogamos que nos escuchéis,
R.: Dignaos perdonarnos.
Dignaos hacernos misericordia.
Dignaos conducirnos a verdadera penitencia.
Dignaos conservar y gobernar vuestra Iglesia santa.
Dignaos mantener en la Santa Religión a nuestro Papa y a todas las órdenes de la jerarquía eclesiástica.
Dignaos defender a vuestra Iglesia de todos sus enemigos.
Dignaos establecer paz y concordia entre los pueblos y reinos cristianos.
Dignaos dar la paz a toda la cristiandad.
Dignaos mantenernos y fortificarnos en vuestro Santo servicio.
Elevad, Señor, nuestras almas a los celestes deseos.
Conceded a nuestros parientes, amigos y bienhechores, los bienes eternos.
Conservadnos los frutos de la tierra.
Dad reposo eterno a los fieles difuntos.
Convertid a vuestros enemigos y a los nuestros.
Concedednos acompañar en la celeste patria a los Santos cuya memoria veneramos.
Hijo de Dios,
R.: Nosotros os lo suplicamos.
Cordero de Dios que borráis los pecados del mundo.
R.: Perdónanos, Señor.
Cordero de Dios que borráis los pecados del mundo.
R.: Escúchanos. Señor.
Cordero de Dios que borráis los pecados del mundo.
R.: Ten misericordia de nosotros, Señor.
Regocijémonos en el Señor este día en que celebramos la fiesta de todos los Santos, cuya solemnidad es motivo de alegría para los mismos cielos.
(Ahora se reza una salve.).
Oración final:
Que Dios Todopoderoso nos haga la gracia de que honremos dignamente los méritos de todos sus santos en una misma solemnidad, y en consideración a tantos hermanos gloriosos que le ensalzan y bendicen en la majestad de su Trono, derrame sobre nosotros, míseros desterrados, las bendiciones de su misericordia.
Así sea, en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo.
Amén.
Honremos con cantos
de gozo y victoria
la augusta memoria
de todos los Santos
que en el cielo están.
¡Dios colme su gloria
según nuestro afán!
Y darnos también
se digne algún día
parte en su alegría.
¡Dios colme su gloria
según nuestro afán!
Por nuestro Señor Jesucristo.
Amén.
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