Semana en el Oratorio

Desprecio de los bienes mundanos

Mostrando entradas con la etiqueta lucha. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta lucha. Mostrar todas las entradas

9.2.19

La Santa Milicia


Si desde su origen la Iglesia ha sido militante, si cada uno de sus miembros ha nacido como soldado de Cristo, ¿quién debe repetir con toda verdad estas palabras de San Pablo: "Yo combato un buen combate" (2 Timot., VI, 7), sino quienes se alistan bajo la bandera del amor, y guerreando al lado de su Madre la santa Iglesia, por el triunfo de este divino amor?

Nunca, en efecto, el imperio de las inteligencias y el reinado de los corazones han sido con más tenacidad disputados, que en esta hora de lucha decisiva.

13.9.18

De las virtudes y de los vicios: Lucha



La Lucha no es precisamente una virtud, es una especie de ser espiritual que tiene vida en el fondo del corazón humano; con él nace y con él muere. Reside en el espíritu del hombre, acompañándolo durante toda su vida. La Lucha es un arma que tiene vida, y su vida es el Dolor. Alcanza la Lucha grandes triunfos y conquistas al alma, y adorna con sus triunfos su inmortal corona.

La Lucha es un arma general que combate igualmente en dos campos de batalla, con la gracia y con la naturaleza, con lo bueno y con lo malo, con Dios y con Satanás. Es la Lucha un ser desconocido, y sin embargo, nadie está más cerca del hombre que la Lucha. Cuando la Lucha vence a Satanás, con todas sus maquinaciones, entonces el alma se santifica, y al fin se salva; más cuando pierde y es vencida en las mil contiendas que constantemente acomete, entonces es infeliz y desgraciada el alma.

2.5.17

El purgatorio aquí en la tierra


En una entrevista con María Simma, la vidente que durante la mayor parte de su vida decía que veía ánimas del purgatorio, que iban a ella a pedirle ayuda y oraciones, respondía a una pregunta que le hacían respecto a que si podía haber personas que vivieran ya, en esta tierra, el purgatorio, afirmando categóricamente que sí. Y explicaba esta señora que hubo casos en los cuales algunas personas le pedían a Dios nuestro Señor que les enviaran los castigos en esta vida, y así poder ir directamente -o lo más directamente posible- al cielo en la otra.

Otras personas no piden eso: simplemente, lo tienen. Este es el caso del niño Amara Stover, cuyas imágenes de los tumores que le salen y le deforman dieron la vuelta al mundo hace algunos días. Ante el dolor y, en este caso, el dolor que no parece tener sentido alguno (como es el caso de un niño, ¿qué pecados puede tener un niño?), siempre nos sentimos un poco sobrepasados. Es ese tipo de dolor que muchos ateos utilizan como razonamiento para decir aquello de: "¿ves cómo no existe Dios? Porque si existiera, no permitiría esas cosas".